Andrés Segovia Torres, guitarrista clásico, profesor y académico. Nació en Linares (Jaén) en 1893 y murió en Madrid en 1987 a los 94 años de edad.
Reconocido como uno de los más grandes guitarristas del mundo, logró que la guitarra clásica fuese considerada a la altura de otros instrumentos como el piano o el violín.
Familia
Su padre era carpintero, pero lo educaron unos tíos que eran ricos. Contrajo matrimonio tres veces porque enviudó: con Adelaida Portillo, Paquita Madriguera y Emilia Corral Sancho. Y tuvo cuatro hijos: el pintor Andrés Segovia Portillo, Leonardo Segovia Portillo, Beatriz Segovia Madriguera y el filósofo e historiador Carlos A. Segovia.
Formación
Conoció la guitarra desde niño, luego marchó a estudiar guitarra a Granada. Pero se formó como autodidacta en el manejo de la guitarra española clásica. Segovia continuó con sus estudios de guitarra durante toda su vida.
Docencia
Durante la década de 1950 Segovia impartió clases en la Academia Chigiana de Siena y luego, durante la década de 1960, en Santiago de Compostela. Posteriormente lo haría en prestigiosas universidades de todo el mundo, como la Universidad de California. En su trayectoria formó a muchos discípulos que luego fueron muy relevantes. Fundó la Escuela de Música de Santiago de Compostela.
Inicios artísticos
Con 14 años actuó por primera vez en público en el Centro Artístico de Granada en Granada y en 1913 dio su primer recital en el Ateneo de Madrid, en el que interpretó, piezas para guitarra de Francisco Tárrega.
La calidad técnica de Andrés Segovia asombró al público. A partir de entonces, la guitarra dejó de considerarse un instrumento meramente popular y se aceptó también como instrumento de concierto.
Innovaciones
Fue progresando en su carrera y ofreciendo recitales para audiencias cada vez mayores, pronto descubrió que su guitarra no producía el volumen suficiente como para llegar al público en grandes salas de conciertos. Esto le animó a buscar entre los fabricantes la forma de mejorar el diseño de las guitarras clásicas.
Así que consiguieron diseñar lo que conocemos hoy en día como guitarra clásica, realizada con una madera de más calidad y con cuerda de nylon. La forma de la guitarra se modificó también para mejorar la acústica.
Estilo
Realizó también aportes a la forma de manejar la guitarra, como mantener el pulgar de la mano izquierda bajo el mástil en lugar de doblarlo alrededor del mismo, ya que con ello se lograba extender el alcance de los otros cuatro dedos y se podía pisar cualquier cuerda sin sordear las inferiores a ella.
Otras aportaciones significativas fueron tañer las cuerdas, a la vez, con la uña y la yema de los dedos de la mano derecha y colocar ésta en posición vertical con respecto a las cuerdas, con lo que se incrementa la fuerza al tocarlas y como resultado se incrementaba el volumen de la guitarra..
Relevancia
Empezó a realizar hacia 1920 giras por Europa y América. Los principales autores de aquella época empezaron a componer piezas especialmente para él. Segovia transcribió también muchas piezas clásicas, incluido el repertorio vihuelístico del Renacimiento y el repertorio laudístico del Barroco.
Discografía
Entre su discografía se pueden destacar los siguientes:
Plays J.S. Bach, Albeniz and Granados, Music of/Guitar Recital, Andrés Segovia Concert, An, Andrés Segovia Program, An, Evening with Segovia, An, Masters of the Guitar, Maestro, Five Pieces from 'Platero and I', Castles of Spain, España, Mexicana, Music for the Guitar.
Guerra Civil
Andrés Segovia vivió en el extranjero desde la década de 1920 hasta 1952 y cuando estalló la Guerra Civil residía en Ginebra (Suiza) y allí permaneció hasta que acabó la guerra, según algunas fuentes apoyó, mediante una carta, el Golpe de Estado pero otros, entre ellos uno de sus hijos lo desmienten.
Regreso a España
Según las memorias de su hijo Carlos A. Segovia:
“Mi padre únicamente regresó a España en 1952, porque estaba cansado de tantos viajes y de tantos cambios de residencia (Ginebra, Génova, Montevideo, Nueva York.), cuando el régimen franquista comenzó a dar ciertas señas de apertura.
Sería por tanto ridículo pretender que mi padre pudo conceder alguna vez la menor estima o el menor crédito a los grandilocuentes pronunciamientos de quienes, una vez en España y desde las entrañas del propio régimen franquista, quisieron ganar el favor del gran músico que volvía a su país convirtiéndolo en el estandarte de sus propios delirios: la grandeza de la "raza" española, el "sacrificio" redentor por medio del trabajo, y un sin fin de majaderías, para decirlo sin ambages, que lo único que consiguieron provocar en él fue, a lo más, el esbozo de una sonrisa irónica.
Cuando llegó a España actuó en el Primer Festival de Música y Danza de Granada y se estableció en Madrid, hasta su fallecimiento en 1987.
Academias
Académico de la Real Academia de Bellas Artes de Nuestra Señora de las Angustias de Granada, 1970
Miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, 1978
Reconocimientos honoríficos
Andrés Segovia obtuvo numerosos e importantes premios entre los que destacan los siguientes:
Gran Cruz de Isabel La Católica, 1958
Doctor "honoris causa" por la Universidad de Oxford, 1974
Premio Nacional de Música 1980
El rey Juan Carlos I, le nombró primer Marqués de Salobreña 1981
Doctor "honoris causa" por la Manhattan School of Music de Nueva York, 1987
En la ciudad de Granada tiene con su nombre una calle en el barrio Zaidín-Vergeles y una parada del Metropolitano de la propia ciudad.
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